HUGO LAZZARINI.EL AMBIENTE DE UN CREADOR

Hugo Lazzarini. El ambiente de un creador. Dicen que el creador está solo. O que la soledad es el signo del creador. Hemingway solo en su cabaña, Herman Hesse transfigurado en su obra «El lobo Estepario».

Es una verdad a medias. Puede haber una soledad espiritual, en la cual el creador se regocija para luego, con alegría y en un marco de albedrío, haga trascender la obra.

OBJETOS Y TRASCENDENCIA

Los objetos circundantes al creador, son elementos de la composición interior. Como una quintaescencia fundamental del proceso de la creación. Estos objetos pueden ser: animados e inanimados.

Juanita», es el nombre de la gatita de Hugo Lazzarini. Ella vive paseando y durmiendo mientras él, desarrolla sus obras. Ella es una experta en solventes, diluyentes, témperas, y óleos.

Juanita», no sabe de concursos ni de curricúlums. Tampoco de pasaportes ni de aviones. Nada la altera. Observa la vida con la tranquilidad de quien sabe que no tiene obligaciones.

LOS LAUROS

«Los laureles son pa´l guiso», espetaba Julio Migno Parera, cuando le daban un reconomiento. Y Julio Migno algo sabía de la vida. Los múltiples reconocimientos cosechados por Hugo Lazzarini en su carrera, son una marca que lo distingue.

Ser distinguido y tener lauros no significa «ser superior». Significa que otros, han visto o reconocido cosas que merecen destacarse. Y que por lo tanto, merecen perpetuarse.

La sala en la cual están colocados sus diplomas, certificados, etc., confiere un peso histórico al visitante pero también, de respeto enorme por la trayectoria del mismo.

CONTEXTO Y REFLEXION FINAL

Por lo tanto, en la infinita soledad del creador, las cosas que coexisten a la par, son funcionales a la creación misma. Porque generan sensaciones, pulsaciones, todo un arco de acción sobre el autor de la obra. Una cosa, realimenta a la otra.

Esa, es la verdad. No otra.